Siguiendo el entorno del macizo del Cap Castell (a la vista del paso de La Foradada mirando hacia el sur, y a unos 80m a la izquierda de dicho paso), se encuentra una gruta que, sin ser complicada, es de una gran belleza. Esta cueva apenas penetra unos 15m en el acantilado, pero su especial conformación al estar dividida por la mitad en dos pisos y la gran luminosidad que entra en ella proporcionan una grata inmersión, apta para todos los niveles, con una profundidad máxima de entre 10 y 12m ¡. De la fauna destacan los santiaguinos, las langostas, el coral y los cangrejos. Al salir de la gruta hay que prestar atención al paso de embarcaciones que atraviesan el túnel de La Foradada.
